La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es el término utilizado para describir las condiciones crónicas en las que el revestimiento del tracto intestinal se irrita y se inflama, causando frecuentes ataques de diarrea acuosa o sanguinolenta, dolor abdominal, pérdida de peso, fiebre y otros síntomas.
Las condiciones más comunes de IBD son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Enfermedad de Crohn causa más a menudo úlceras (llagas) en el revestimiento de los intestinos delgado y grueso, pero puede afectar a cualquier parte del sistema digestivo. Colitis ulcerosa causa inflamación y úlceras en el revestimiento de la sección inferior del colon (colon sigmoide) y del recto, aunque puede afectar a todo el colon (intestino grueso). Estas condiciones tienden a aumentar y disminuir en severidad, con brotes que se alternan con períodos de remisión (cuando los síntomas desaparezcan por un tiempo). Aproximadamente 1 - 5 millones de personas en los Estados Unidos tienen estas condiciones.
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) siempre está acompañada por inflamación en el revestimiento intestinal que puede ser visiblemente detectado por rayos X o colonoscopia, pero el síndrome del intestino irritable (IBS) no está asociado con inflamación visible.
Aproximadamente un millón de estadounidenses sufren de EII y la causa sigue siendo desconocida. Hay dos formas de EII (a veces llamada colitis) cada uno con una triada clásica de los síntomas (que no siempre están presentes). La colitis ulcerosa se caracteriza por diarrea, sangrado rectal y dolor abdominal. La enfermedad de Crohn se caracteriza por la pérdida de peso, diarrea y dolor abdominal.
La enfermedad inflamatoria intestinal es un trastorno del tracto gastrointestinal. Más información del Dr. Eugene Yen en nombre de NorthShore HealthSystem Universidad sobre la enfermedad inflamatoria intestinal (EII).
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es una condición que causa inflamación en curso de los intestinos. La condición puede afectar sólo al intestino grueso (colitis ulcerosa) o cualquier parte del tracto digestivo, desde la boca hasta el ano (enfermedad de Crohn).
Los síntomas de la enfermedad inflamatoria intestinal pueden incluir dolor abdominal, diarrea frecuente, que puede contener sangre o pus, fiebre, escalofríos, pérdida de peso y fatiga. La enfermedad puede ser leve o severa. La inflamación también puede afectar a otras partes del cuerpo, tales como los ojos o de las articulaciones, y puede causar un tipo de artritis.
La enfermedad inflamatoria intestinal puede repetirse muchas veces en la vida de una persona. Se trata con medicamentos ya veces con cambios en la dieta. Si la enfermedad está en remisión (no presenta síntomas), el tratamiento puede no ser necesario, a pesar de que los medicamentos pueden ayudar a mantener la enfermedad en remisión. Un ataque severo puede requerir que la persona sea hospitalizada para recibir tratamiento. En algunos casos, la cirugía puede ser necesaria.
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) tiene una amplia variedad de síntomas, incluyendo dolor abdominal persistente, diarrea, sangrado rectal, fiebre y pérdida de peso. Enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa, dos condiciones que en conjunto se conocen como enfermedad inflamatoria del intestino, a menudo tienen síntomas similares y se tratan de forma similar, sin embargo, los médicos los consideran como algo distinto.
Enfermedad de Crohn puede ocurrir en cualquier parte del tracto gastrointestinal, desde la boca hasta el ano, pero por lo general se encuentra al final del intestino delgado (íleon), en el colon, o ambos. Se trata de todo el espesor de la pared del intestino y se introducen, en mayo de órganos cercanos. La pared intestinal se vuelve más gruesa, así como inflamación constante y filtración de los contenidos intestinales del intestino puede provocar abscesos internos. Una fuga (fístula) que permite que el material intestinal para pasar al abdomen puede requerir cirugía. Las hemorragias graves no es probable.
La enfermedad de Crohn suele aparecer en personas jóvenes, que desarrollan dolor en el lado derecho del abdomen, fiebre de bajo grado, y tal vez cambios en las deposiciones. Algunos pacientes desarrollan un absceso o una fístula alrededor del ano.
En algunos casos, es necesaria la cirugía para tratar una complicación de la enfermedad, tales como la obstrucción del intestino. Alrededor del 40% al 60% de las personas con enfermedad de Crohn eventualmente necesitar cirugía para extirpar las áreas dañadas de su intestino delgado o el colon.
La colitis ulcerosa se caracteriza por la inflamación de la mucosa, o mucosa, del colon. Al igual que el SII, puede causar dolor abdominal y diarrea. A diferencia de IBS, las heces generalmente contiene sangre, los síntomas intestinales y puede ir acompañada de la pérdida de peso, fiebre, un recuento elevado de glóbulos blancos, y una variedad de lesiones de la piel y artritis. La colitis ulcerosa es más fácil de diagnosticar que la enfermedad de Crohn y se trata con muchos de los mismos medicamentos.
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